Una historia de solidaridad

Desde sus primeros trazos, inspirados en grandes maestros como Vincent van Gogh, este artista encontró en el arte un lenguaje universal para transformar realidades. Su talento lo llevó a crear "Muralismo Solidario Nacional", un proyecto que marcó una época en los años 90, llevando colores y esperanza a más de 14 escuelas de barrios vulnerables en Mar del Plata. A pesar de las adversidades y la falta de apoyo económico, su compromiso con la comunidad nunca flaqueó, logrando involucrar a cientos de niños en el poder transformador del arte.

En 2018, su pincelada solidaria alcanzó nuevas alturas con un mural monumental en homenaje a los héroes del submarino ARA San Juan, donde familiares y turistas se unieron para honrar su memoria. Esta trayectoria de servicio y creatividad fue siempre el motor de su vida artística.

En 2024, una causa personal lo llevó a reconectarse con el público. Su perrita Tita necesitaba un costoso tratamiento veterinario, y una campaña viral en redes sociales le permitió recaudar los fondos necesarios gracias a la solidaridad de cientos de personas. Inspirado por este gesto colectivo, decidió convertir su arte en una herramienta para cambiar vidas, destinando parte de las ventas de sus obras al apoyo de refugios de animales y campañas veterinarias.

Hoy, este artista invita a todos a sumarse a su causa, ya sea adquiriendo una obra o compartiendo su mensaje. Cada colaboración ayuda a transformar el arte en esperanza para los más vulnerables, demostrando que la solidaridad no tiene límites.