Además de sus proyectos de murales, también realizó obras en instituciones que apoyan a niños y adultos con discapacidades, reafirmando su enfoque en el arte solidario. Entre sus logros, destaca un mural de grandes dimensiones en la escuela Alfonsina Storni de Mar del Plata, completado en 2001. Este mural, que representó la campaña libertadora del General San Martín, contó con la participación de más de 100 alumnos y la colaboración de la cooperadora escolar, que organizó una inauguración especial con la presencia de granaderos del Regimiento Montado General San Martín.
Aunque participó en algunos concursos de pintura durante su trayectoria, siempre priorizó los proyectos solidarios y colectivos por sobre la búsqueda de premios o reconocimientos.
En 2020, presentó un proyecto de escultura de gran formato en homenaje al submarino ARA San Juan , que incluyó una maqueta detallada y su propuesta oficial ante la prensa y el municipio de Mar del Plata. Sin embargo, el proyecto no fue llevado a cabo.
Un renacer del arte
Tras varios años fuera del ojo público, en 2024 el artista vuelve a la escena de una manera conmovedora. La situación surgió a raíz de la necesidad de financiar un tratamiento veterinario urgente para su perrita, Tita. A través de una campaña viral en redes sociales, logró recaudar los fondos necesarios gracias a la colaboración de cientos de personas que se unieron a su causa. Este acto no solo salvó a Tita, sino que marcó un punto de inflexión en su carrera.
Inspirado por la solidaridad que recibió, decidió transformar esta experiencia en un motor para su arte. Desde entonces, ha impulsado un nuevo proyecto en el que cada obra vendida contribuye directamente a apoyar refugios de animales y campañas veterinarias. De esta manera, su arte no solo embellece los espacios de quienes lo adquieren, sino que también genera un impacto positivo en la vida de los animales más vulnerables.
Hoy, invita a todas las personas a unirse a esta causa, ya sea adquiriendo una de sus obras o compartiendo su mensaje. Cada colaboración, por pequeña que sea, ayuda a mejorar las condiciones de vida de muchos animales necesitados y permite continuar con este noble proyecto que une el poder transformador del arte con la solidaridad hacia los refugios y las campañas de bienestar animal.